En Chile toman «footies» y en Inglaterra, «uglies», mientras que en Italia y Brasil hay más selfies tradicionales. En China, los selfies son muy populares entre los jóvenes, mientras que en la frontera entre Turquía y Siria son considerados demasiado informales para las redes sociales. Esa es una de las conclusiones del grupo de antropólogos que se desperdigó por todo el planeta para vivir en el mundo virtual de diferentes países y comparar después sus experiencias en el University College London. Vivieron 15 meses en ocho países distintos, en lugares variados que incluían una aldea inglesa, una ciudad industrial y otra rural en China, una ciudad en la frontera entre Siria y Turquía, comunidades de bajos ingresos en Brasil y Chile, un complejo informático entre unas aldeas indias y pueblos en Italia y Trinidad. Su misión era analizar cómo la población local se comportaba e interactuaba con las redes sociales. Su premisa: la gente que usa las redes sociales es la que las crea, no los que desarrollaron las plataformas.
