La nueva normativa chilena permitirá al Ministerio de Transportes fiscalizar mediante el uso de cámaras infracciones como circular a exceso de velocidad y saltarse una luz roja.
La Ley CATI (Centro Automatizado de Tratamiento de Infracciones), que entró en vigencia en Chile el pasado 1 de julio, busca mejorar la seguridad vial mediante el uso de tecnología para fiscalizar las infracciones de tránsito, como el exceso de velocidad, el no respeto de las señales y semáforos, entre otras.
Esta ley se basa en la experiencia exitosa de otros países que han implementado sistemas similares y han logrado reducir significativamente las muertes y lesiones por siniestros de tránsito.
Según datos del Ministerio de Transportes, países como Francia, España, Australia y México, han experimentado un gran éxito llevando a cabo programas similares que han permitido disminuir el número de fallecidos producto de accidentes de tránsito.
La experiencia internacional
¿Sabías que Francia fue uno de los primeros países en implementar un sistema completamente automatizado para el tratamiento de infracciones de tráfico? En 2001, tenía el cuarto peor registro entre los países europeos, con 105.500 accidentes de tráfico y 7.655 muertes.
Pero gracias a la creación del Centro Nacional de Tratamiento de Infracciones de Tráfico (CNT) en 2003, ha habido una reducción anual de alrededor del 7% en el número de víctimas mortales. Entre 2001 y 2008, hubo una disminución del 48% en las muertes por accidentes de tráfico, y para 2010 esta reducción había alcanzado el 51%.
España siguió los pasos de Francia al incorporar herramientas tecnológicas a sus esfuerzos de fiscalización en 2005. Esto llevó a la creación del Centro de Tratamiento de Denuncias Automatizadas (CTDA) en 2007.
Desde 2005, todos los indicadores del comportamiento de los conductores han mostrado una evolución favorable. Este mejor comportamiento se tradujo en una reducción del 47,5% en el número de víctimas mortales entre 2005 y 2010. Esto significa que, durante este período, se salvaron cerca de 5.800 vidas.
En Australia, el estado de Victoria lanzó su estrategia Arrive Alive! (¡Llega con vida!) en 2002, centrada en la reducción de la velocidad vial. Durante los primeros cuatro años (2002-2005) hubo una reducción del 16% en los accidentes mortales por tráfico. La reducción del 43% en las muertes en el área metropolitana de Melbourne entre 2001 y 2003 se extendió a todos los tipos de usuarios (peatones, ciclistas, conductores, etc.).
En México, según información proporcionada por la Secretaría de Seguridad Pública del Gobierno del Distrito Federal, entre 2006 y 2010 hubo una disminución del 13.6% en las muertes por accidentes de tráfico debido principalmente al aumento en las fiscalizaciones mediante cámaras.
El éxito de esta medida se extendió a la ciudad de Pachuca, donde hasta la fecha se ha registrado una reducción del 40% en las muertes por accidentes de tráfico después de 22 meses de haber implementado la misma iniciativa.
Auter: ¿Cómo funcionan las cámaras?
Por lo general, la mejor tecnología para fiscalizar el exceso de velocidad y otras faltas graves son los fotorradares. Según indican desde Auter S.A., uno de las empresas que participará del piloto de la Ley CATI, se trata de dispositivos capaces de medir la velocidad de un vehículo y fotografiar la patente si es que va a exceso de velocidad.
“Son dispositivos que captan cerca de 250 imágenes por segundo, por lo que perfectamente pueden registrar a automóviles que circulen a más de 50 km/h en zonas urbanas, o bien, a más de 120 km/h en carreteras. En el caso de la Ley CATI, las patentes registradas de los infractores serán enviadas al Ministerio de Transporte quien será el que curse la multa”, explica Rodrigo Espinoza, Gerente General de Auter.
Por el momento hay 13 cámaras funcionando en un plan piloto, conoce dónde están aquí.