Con una cacareada fiscalización a los buses urbanos las autoridad quiere que los ciudadanos a pie, quedemos tranquilo y con la impresión que sí se hace la pega. Tal vez, las fiscalizaciones en los terminales y en los puntos de ingreso a la ciudad son positivos, pero estás igual son burladas en la carretera.
Fuentes de El Sol de Iquique nos señalan que el famoso sistema que hace sonar una chicharra cuando el conductor sobrepasa los cien kilómetros por horas no son fiscalizadas, además que los mismos chóferes cuentan que se les quitó la atribución a Carabineros para revisar los sistemas que verifican que se cumplan las normas d ella autoridad de Transportes.
Transportes envió a los medios de comunicación, incluido este portal pobre pero muy honradísimo, un comunicado con los resultados de 578 controles preventivos en la cómodas lozas de los terminales, que arrojó 95 infracciones durante los días de fin de año.
Todo bien, pero se deberían hacer controles sorpresivos en carreteras y ahí se van a encontrar con sorpresas. Las mismas fuentes no indican que algunas empresas colocan el el terminal un bus en buenas condiciones, pero una vez salido del áreas urbanas los pasajeros son cambiados a otros , que a veces no cumple cabalmente todas las normas que impone la autoridad de Transportes.
Pero volvamos a lo que nos informa la seremi de Transportes de Tarapacá
“Dichos controles se realizaron entre el lunes 19 y el viernes 30 de diciembre (con excepción del domingo 25) en el terminal rodoviario de Iquique, terminal de Tur Bus, Mercado Centenario, terminal rodoviario de Alto Hospicio, terminal de transferencia de Pozo Almonte, en el kilómetro 47 (acceso oriente de Iquique) y el kilómetro 32 (salida de Alto Hospicio hacia Humberstone) de la Ruta 16, en la plaza de armas de Pica, en la Ruta 5 (en al acceso a Huara y conexión ruta 15CH Huara-Colchane) y en la Ruta 15CH (acceso entrada a Colchane)”.
Sería más importante ir a la raíz del asunto y fiscalizar por sorpersa todo el año, y no solo en fechas que las empresa se encuentran preparadas para la revisión. Más acción y menos cacareo.