El 23 de marzo de 2020, se confirmó el primer caso de Covid-19 en la región de Tarapacá, marcando el inicio de una etapa crucial para la comunidad local. El paciente era un hombre de 47 años, residente de Iquique, quien había regresado de un viaje reciente a Colombia.
El caso comenzó a sospecharse tras la aparición de síntomas, como tos, en el paciente, lo que lo llevó a buscar atención médica. Las muestras fueron enviadas al laboratorio de Antofagasta, donde se confirmó el contagio. Con el resultado positivo, el hombre fue puesto en aislamiento domiciliario en Iquique, siguiendo los protocolos de las autoridades sanitarias.
“El paciente se encuentra en buen estado de salud, notificado de su examen positivo, con una cuarentena estrecha con aislamiento, y a partir de ahora corresponde la etapa de investigación epidemiológica, tenemos que hacer la definición de todos los casos que puedan caer en la categoría de contacto estrecho, que deban iniciar la cuarentena obligatoria”, informó el seremi de Salud de la época, Manuel Fernández.
Este primer caso fue un recordatorio temprano de la gravedad de la pandemia, motivando a la región a implementar medidas de autocuidado y prevención para contener la propagación del virus.
Hoy, cinco años después, este episodio sigue siendo recordado como el inicio de un periodo que transformó profundamente la vida cotidiana de todos. ARCHIVERO
