Durante las manifestaciones de los Indignados de Tarapacá en 2015, se produjo un incidente que dejó una marca en la prensa local. Un violento enfrentamiento entre efectivos de Fuerzas Especiales de Carabineros y comunicadores de Radio Paulina terminó con equipos destruidos, ropas mojadas y una amarga experiencia para quienes cumplían su labor de informar.
Marcelo Santibáñez, conductor del programa La Mañana de Paulina, relató el incómodo episodio: “Quizás no están acostumbrados a nuestra forma de trabajar, que colocamos los micrófonos para que se escuche el audio, y eso puede haber molestado a los Carabineros”. En medio del forcejeo, tanto él como la reportera Cecilia Caro fueron objeto de empujones por parte de los efectivos policiales. Todo sucedió mientras los carabineros intentaban arrebatar una bandera chilena a los manifestantes.
“Me tomaron y me sacaron del lugar, donde se destruyeron los equipos, cuyo costo debe ser de unos tres millones de pesos”, explicó Santibáñez, lamentando la pérdida de herramientas esenciales para la emisora. Por su parte, Cecilia Caro, al intentar defender a su colega, también sufrió los bruscos empujones y agresiones de los Carabineros.
Imágenes Carlos Carpio Legarda.
Aunque el tiempo ha permitido recordar este episodio con un matiz anecdótico, no se puede ignorar el impacto que tuvo en la percepción del respeto hacia los periodistas o reporteros en escenarios de alta tensión. ARCHIVERO
