El Tanquetazo, también conocido como Tancazo, fue un intento de golpe de Estado contra el gobierno de Salvador Allende en Chile. La sublevación tuvo lugar el 29 de junio de 1973, cuando el teniente coronel Roberto Souper, al mando de un regimiento de blindados, hecho que da nombre a la intentona, trató de derrocar al presidente electo.
La victoria de la Unidad Popular en las elecciones de 1970 provocó el malestar de los sectores más conservadores de la sociedad chilena. Su apuesta por un socialismo democrático les hacía temer un cambio en las estructuras sociales y económicas. A esta oposición interna hay que unir la abierta hostilidad de los Estados Unidos.
A partir de 1972, la economía chilena sufrió problemas importantes. Factores internos y externos provocaron problemas con el suministro de alimentos y el mercado negro aumentó. Por su parte, un gran sector de las Fuerzas Armadas, tradicionalmente conservadoras, decidió actuar por su cuenta.
Elecciones parlamentarias de 1973
La economía chilena comenzó a tambalearse en 1972. Sin embargo, las elecciones legislativas de marzo de 1973 supusieron una victoria de la Unidad Popular, que obtuvo el 45% de los votos.
El golpe
El Tanquetazo fue liderado por el teniente coronel Roberto Souper. Con el Regimiento Blindado Nº 2, trató de derrocar al presidente Allende el 29 de junio de 1973.
El nombre proviene del hecho de que en la sublevación se usaron principalmente tanques. Tras unas horas de tensión, los soldados leales el comandante en jefe del ejército, consiguieron sofocar la rebelión.
Las elecciones parlamentarias de marzo de 1973 las ganó, de nuevo, la Unidad Popular. La oposición se había presentado en coalición con la intención de conseguir dos tercios de los escaños y, así, destituir al presidente.
Allende intentó acercarse a la Democracia Cristiana para buscar soluciones a la crisis, pero no encontró buena acogida, ni siquiera cuando contó con la mediación del cardenal Raúl Silva Henríquez.
Para ese momento, el presidente ya temía que se produjera un golpe militar. Lo único que lo evitaba era que el comandante en jefe, Carlos Prats, era fiel a la Constitución.
Consecuencias
Cuando Souper se dio cuenta de que su sublevación había sido derrotada, procedió a entregarse a las autoridades. Allende convocó durante la tarde el mismo día 29 una manifestación frente al Palacio de La Moneda. El presidente salió al balcón junto a los tres comandantes en jefe de las Fuerzas Armadas y agradeció su actuación durante el golpe.
Pinochet
Según los historiadores, el fracaso del Tanquetazo se debió a la actuación de Carlos Prats, el comandante en jefe del ejército. Otra causa fue que el Regimiento de Infantería Nº 1 Buin no se unió a la intentona, al contrario de lo que se esperaba.
Precisamente, en el Buin se encontraba Augusto Pinochet, entonces jefe del Estado Mayor. El general apareció en La Moneda al mediodía, en uniforme de combate. Para ese momento, sin embargo, los rebeldes ya habían decidido retirarse. Esto ha llevado a muchos expertos a pensar que Pinochet estaba jugando a dos bandas.