Anoche cuando estábamos viendo la teleserie de la tarde, nos la cortan antes de tiempo, claro era para comenzar con la franja electoral de las Primarias. A eso de un cuarto para las 9 de la noche comenzó el ofertón, de un “país mejor”, “vamos a salir adelante”, “se va a acabar la pobreza”, “queremos un Chile mejor”, todo eso que se escucha en las campañas electorales.
El primero en partir fue el precandidato de Chile Vamos, el ex presidente Sebastián Piñera, que hará un gran esfuerzo para gobernar nuevamente esta gran país, claro que con la mirada individualista y economicista.
Luego vino es el espacio de Manuel José Ossandón, que al mejor estilo del periodista deportivo “Cañón” Alonso se las dio de reportero en las calles de Santiasco y con imágenes de El Morro de Arica, recreando las franjas de los 80, cuando la Concertación nos vendía la pomá. Igual el Cote Ossandón le mandó sus palitos a Piñera. Pero puso el pecho las balas: “Más de alguna vez metí las patas en una entrevista, pero nunca las manos”
“Luchar por los invisibles” y un llamado a madrugar pidió Felipe Kast en un discurso armadito, convincente, pero rápido, casi militarizado con “la fuerza de las ideas”, guiños a la clase media y el cliché de “los patines”. “Los operadores político se van a la calle”, que dejó tiritando a gran parte de los funcionarios de aparato estatal.
Beatriz Sánchez apeló a su pasado de haber estudiado periodismo en la U de Concepción, donde conoció a su pareja, Pablo. En el espacio dejo clarito que no hay salud para todos, y las actividades para reunir fondos por falta de medios y conseguir un tratamiento. Muy emotiva, casi parecida a la propaganda de Michelle Bachelet del 2013.
Alberto Mayol, parte recordando que es hijo de un militante de la UDI y colaborador de la Dictadura Cívico Militar. En imagen dejó a poto pelado como algunos personeros de la exConcertación se han olvidado de la gente. También habla sobre el tema de la discriminación, la educación donde recuerda esa frase de Piñera: «La educación es un bien de consumo”.
Bueno, y la Nueva Mayoría sigue lamiendo sus heridas por no participar en la Franja.