Hace 10 años, estas ligeras lloviznas en el «puerto glorioso» generaron curiosidad entre los habitantes, especialmente porque no son comunes en esa zona. Este fenómeno, registrado en aquel entonces en una mañana de miércoles, tenía un carácter anecdótico en comparación con las intensas lluvias del sur del país.
El clima en aquel momento reflejaba una temperatura agradable de 23 grados a las 8:45 de la mañana, con una humedad del 90%. Según los pronósticos de Meteored, la llovizna se mantendría durante la mañana, mientras que en la tarde el cielo quedaría parcialmente nublado.
Mirando en retrospectiva, este tipo de fenómenos, aunque pequeños, forman parte del registro de las particularidades climáticas de la región, recordándonos cómo estas «gotitas» eran vistas como una oportunidad para limpiar el aire, según las tradiciones de los abuelitos pampinos.