El presidente de la Cámara de Comercio de Iquique, Rafael Montes, esperó algunos días para opinar acerca de lo ocurrido con el incendio de la ex Aduana, edificio patrimonial que data de 1871.
“Indigna ver y escuchar a los políticos dando opiniones y algunas posibles soluciones, cuando la edificación sufrió un grave daño en su estructura interna, precisamente porque hay poca o nula preocupación. Indigna también que ahora que ocurrió el incendio aparezcan tantos «preocupados». Lo que se debe hacer es tomar en serio el patrimonio de nuestra querida ciudad y actuar rápidamente para reparar o restaurar”, comentó.
CORPORACION
El dirigente gremial también dio la idea de hacer participar a la ciudadanía. “La autoridad apoyar la creación de una Corporación Patrimonial, con asignación de recursos y el desarrollo de un trabajo permanente, con objetivos claros y precisos. Por ejemplo, los vecinos propietarios de los inmuebles de calle Baquedano, se unan y planteen los problemas que tienen a las autoridades y proponer soluciones, para llevar a cabo las restauraciones que sean necesarias, a cargo de expertos; no poner y sacar cualquier tipo de vereda, etc. Hay mucho por hacer. Lo único que está más que claro es que hay que hacer algo ahora ya”, agregó.
BENGALAS
Respecto a que una bengala habría provocado el incendio, Montes, dijo: “Más que tenerle miedo a las bengalas, hay que temer a los hombres. Si es que el incendio fue provocado por una bengala, todos sabemos quiénes son los que tienen acceso a ellas en esta zona. Peor más que buscar un culpable, el enorme daño ya está hecho y, lo mejor, es buscar una solución urgente y conversar con los que saben. En Iquique, tenemos un gran ejemplo, con el Ejército, que tiene muy bien cuidado el Regimiento Granaderos. Ellos se preocupan del patrimonio y lo conservan con responsabilidad y, seguramente, con gastos. Pero el deber es el deber. Hay que copiar ese buen ejemplo y otros como la minera Collahuasi que recuperó un inmueble en calle Baquedano. Lamentablemente son sólo dos buenos ejemplos, debería haber más y determinar que la autoridad se decida a apoyar con todo, tomando en cuenta que son inmuebles con un valor histórico, patrimonial y turístico invaluable. No debemos pensar que una ciudad es moderna porque tienes torres y torres de edificios; en el sector de la Catedral había unas viviendas antiguas, pero se derrumbaron para construir un edificio de más de 20 pisos. No olvidemos que bajo la picota han caído inmuebles patrimoniales como el Regimiento Carampangue y por un incendio, el Palacio Mujica, que hoy es un sitio eriazo”, concluyó.
