Largos cinco meses detenido en cuarteles policiales de Iquique, el ex cabo segundo de Carabineros, Juan Carlos Farías Ovando, quien fue procesado por la desaparición de 28 armas desde dependencias de la PrImera Comisaría de Iquique, está libre y dedicado a comprobar su inocencia en los hechos que asegura “le imputaron injustamente”.
Apoyado su familia, Farías quien fue dejado en libertad hace una apenas una semana por el fiscal militar Jaime Arriagada, cuenta que “fueron meses terribles, de mucho impacto sicológico, físico y un golpe muy fuerte para su familia. Pasaron muchas cosas, pero gracias a la tenacidad de mi esposa, amigos y abogados de la Fundación Ecuánime que defiende a carabineros, se logró comprobar mi inocencia”, afirmó.
“Nunca trabajé ahí, desde que egresé en el año 2010 de la Escuela de Carabineros estuve destinado a la calle en Iquique y Alto Hospicio. No sé cómo me llegaron a involucrar, pero todo ha sido muy injusto y doloroso. Vengo de una familia con muchos valores y normas, jamás me habría ensuciado las manos con algo tan básico como un armamento. Tengo principios y he luchado contra la delincuencia, jamás me habría puesto al lado de ella. Todos los indicios en la investigación muestran que había un desorden en la Unidad Fiscalizadora”, señaló.
El ex funcionario policial relató que su detención le cambió la vida drásticamente. “Destruyeron la vida que tenía, gracias al apoyo de mi familia y amigos estoy parado aquí y levantando la frente. Espero que todo se aclare por el bien de los que fuimos involucrados injustamente y de los carabineros que están en la calle todos los días haciendo su trabajo”, puntualizó.
PRUEBAS FALSAS
Juan Carlos Farías asegura no tener vínculos con los otros dos procesados, aunque con uno de ellos fue compañero de curso en la Escuela de Carabineros, no descartando una vez que se cierre la causa y la arista que investiga el fiscal Carlos Palma, relacionada con la implantación de pruebas falsas por parte de personal de Labocar de Temuco, pueda solicitar su reincorporación a la institución.
“Aún es demasiado pronto para tomar una decisión de ese tipo, debo evaluar el bienestar de mi familia y que con las diligencias que están pendientes en la investigación se constate mi total inocencia. A la institución siempre lo voy a amar y está en mi corazón, es gente que forma parte de las filas de Carabineros con las que estoy muy dolido. Muchos me dieron vuelta la espalda, pero también hubo otros que me apoyaron, fueron donde estaba y me respaldaron”.
Farías fuera de encontrarse a la espera de los próximos pasos que darán en la indagación, también presentó una denuncia en contra de los funcionarios de Fuerzas Especiales de Carabineros que lo habrían agredido y amenazado durante el tiempo que permaneció detenido en el cuartel de esa unidad.
En la indagación por la desaparición de 28 armas todavía se mantienen detenidos los ex funcionarios policiales Felipe Machuca y Heinz Gneiser por los delitos de hurto y convención ilícita de armas.