Reconociendo la necesidad de contar con infraestructura y equipamiento que acogiera a una demanda creciente y apoyara el accionar de profesionales con una vasta experiencia, Clínica Tarapacá dio el vamos oficial a su nueva Unidad de Paciente Crítico Adulto (UPCA).
La Unidad se emplaza en un área de 450 mts y cuenta con nueve camas, todas equipadas para convertirse de UTI a UCI y viceversa. El área está avaluada en $700 millones y su reubicación y complejización se llevó a cabo en seis meses.
“Este desarrollo está asociado con nuestro interés en aumentar la complejidad de nuestra Clínica frente a las necesidades de la comunidad, en especial lo asociado a la Ley de Urgencia, a la oferta de cirugías y al tratamiento de pacientes de alta complejidad que requieren tratamiento, intervenciones quirúrgicas y procedimientos de hemodinamia”, entre otros, explicó Rolando Ramos, gerente Ambulatorio en Clínica Tarapacá.
Encabezada por la doctora Paola Solange Mañez, especialista en Terapia Intensiva, la dotación comprende a enfermeras, kinesiólogos y paramédicos, además de personal de refuerzo según las necesidades que se presenten. Dentro de su tecnología se cuentan bombas de infusión continua, equipamiento para diálisis, ventilador mecánico, máquina de marcapasos transitorio, ecógrafos y otros implementos para realizar procedimientos in situ.
Según comenta la doctora Mañez, el proyecto se gestó a propósito de la pandemia, donde la emergencia sanitaria fue empujando el crecimiento de la Unidad de Cuidados Intensivos, tanto en equipamiento como en capacidad y conocimiento profesional, lo que se hizo más evidente cuando esa situación fue decantando: “Ya estábamos listos para recibir a más pacientes, no solo aquellos afectados de Covid-19 y problemas respiratorios, sino también aquellas personas con problemas cardiacos, nefrológicos, pacientes con sepsis y neurológicos. Y necesitábamos una infraestructura que pudiera albergar adecuadamente todo lo que se estaba realizando en Clínica Tarapacá, considerando lo que había crecido la unidad, las capacidades y el personal”, señaló.
La coordinación de Enfermería en la nueva UPCA está a cargo de Paulina Figueroa, quien, en línea con lo que comenta la doctora Mañez, destacó las capacidades de la dotación de personal, todos quienes cuentan con una vasta experiencia en procedimientos de manejo de paciente crítico, como ventilación mecánica e instalación de otros soportes vitales.
La nueva UPCA está operando desde fines de agosto, con el traslado de los pacientes que recibían tratamiento en la antigua UTI, y próximamente se incorporará conocimiento en relación con las cirugías neuroquirúrgicas.
El balance que hacen las profesionales es positivo, tanto respecto de la actividad como del desempeño, un servicio de excelencia que siempre ha caracterizado a Clínica Tarapacá, sostuvieron.