Instancia tuvo fallo unánime de los cinco ministros que integran la tercera sala del máximo tribunal
La Corte Suprema de Justicia acogió este miércoles la reclamación interpuesta por el diputado PC, Matías Ramírez, quien, junto a otras organizaciones sociales, denunciaron en 2018 las faltas cometidas por la empresa Cosemar, quienes no cumplieron con los requisitos ni estándares básicos para el emplazamiento del relleno.
En los documentos con más de 45 páginas, el tribunal relata persistentemente las faltas cometidas por la empresa, quien inclusive, habría hecho caso omiso a las advertencias de los riesgos asociados a la afectación del medio ambiente por eventuales sismos, al encontrarse en una zona con fallas geológicas, más aún sin la participación ciudadana.
En tal sentido, el diputado por Tarapacá, Matías Ramírez, señaló a la prensa que “el fallo de la Corte Suprema es contundente en establecer que la empresa Cosemar incumplió el procedimiento administrativo ambiental, al no acompañar antecedentes que daban cuenta de la existencia de una falla geográfica donde está emplazado el relleno sanitario Santa Inés”.
Además, la autoridad agregó que “considero que es una situación sumamente grave, que esta empresa no consideró los efectos negativos sobre la población de Alto Hospicio, por la omisión de información relevante”.
El fallo significa un importante precedente en materia medio ambiental, puesto que en el documento evacuado por la tercera sala del máximo tribunal señala que “se reconoce el avance de la ciencia y la preocupación de la comunidad tanto internacional como nacional, por el respeto y cuidado del medio ambiente, lo que ha traído aparejado nuevas directrices y principios que rigen el Derecho Ambiental, relacionado con el desarrollo sostenible, formular planes y programas destinados a fortalecer conocimientos (…) como también, el refuerzo de la participación ciudadana”.
Este escenario favorable para el medio ambiente, pone nuevamente en cuestión la situación sobre residuos en la región, sobre todo tras el cierre del relleno sanitario El Boro, que se decretó el cese de su funcionamiento en febrero pasado. Es por ello que Ramírez instó tanto al gobierno y municipios, a buscar una solución permanente y acorde al siglo veintiuno con miras a la protección de la salud de los vecinos y el cuidado del medio ambiente con medidas de reciclaje.