Más allá que su figura fuera el principal sospechoso en la desaparición, en 1999, del joven Jorge Matute John, Bruno Betanzo en los ultimo años se dedicó a la actividad empresarial desde Ártica Ltda. Las sede de la empresa era la ciudad de Concepción y Antofagasta, desde donde participó en varias obras del Servicio de Salud de Iquique.
El ex dueño de la polémica discoteca «La Cucaracha», estaba de vacaciones en Egipto y al momento de su muerte estaba junto a un guía turístico.
Su última pega, en julio del 2016, fue un trabajo de arquitectura en el “Cosam Dr. Salvador Allende, ubicada en Salitrera Constancia y Los Algarrobos, al sur de Iquique.