EL MARTILLO
Por fin retomamos lo que nunca se debió haber perdido, que el 21 de mayo se conmemore como corresponde y sin mezclas de otro tipo de cosas. Desde 1925 se instauró que la cuenta pública presidencial fuese esa fecha. En este contexto Iquique se alegra porque se le regresa a la esencia misma de una de las fechas más importante en la historia de Iquique, sin duda que este puerto glorioso se siente bien y se alegra por algo que nunca debió mezclarse.
En los últimos años, la gran gesta del capitán Prat y sus hombres, eran empañados con información e imágenes de los desórdenes en Santiasko y Valparaíso, realmente se veían batallas campales, haciendo sentir a los iquiqueños una suerte de confusión y desazón.
Otrora está en el recuerdo la gran gesta heroica del combate del 21 de mayo de 1879 en la rada de Iquique, Chile recordaba quizás la hazaña que levantó el ánimo a las tropas chilenas en el conflicto de 1879 y que llevo a la victoria para que estas tierras fuesen chilenas.
Años atrás, la ciudad de Iquique despertaba con 21 cañonazos, se embanderaba toda la ciudad, las casas pintaban sus frontis, el comercio adornaba sus vitrinas, le gente se compraba ropa nueva, incluso en una época se realizaron ramadas y a las 12:10 se tocaba la sirena del Colectivo O’Higgins, (hora que se hundió la Esmeralda el 21 de mayo de 1879), es decir un gran ambiente. Quizás no se retorne a ese tipo de manifestaciones, pero si recuperaremos la idea de esa fecha, dedicándole un día al valor, patriotismo y entrega de chilenos hacia su país.
Por otra parte, esto hace que las nuevas generaciones no se confundan con esta fecha y sientan que es un momento histórico para Chile y no un conflicto político.
En los últimos tiempos, el 21 de mayo se relacionaba con disturbios, muerte, congreso, marchas, bombas lacrimógenas, encapuchados, declaraciones políticas, proclamas partidarias, comentarios y otro tipo de situación que no tiene nada que ver con la gesta heroica.
Destacar que no hay iquiqueño viviendo en la ciudad o esparcido por la faz de la tierra, que no realice un alto el 21 de mayo para recordar y saludar a este puerto glorioso.
Señalar que esa gesta heroica significó mucho para Chile, sobre todo en estas tierras nortinas, donde se siente la distancia y el aislamiento del centralismo. El retomar como fecha única el 21 de mayo, nos coloca de nuevo en el lugar que Iquique se merece, lugar donde se gestaron los hechos más importantes para el país, hay un dicho muy local, quizás un poco soberbio, pero tiene sentido, que dice, “Sin Iquique, Chile no tendría historia”, y si uno hace una mirada histórica de los acontecimientos que han ocurrido en este puerto, pucha que cobra sentido.
Ahora, otro desafío, es que los restos de los marinos fallecidos en el combate naval regresen a esta ciudad y que el principal acto cívico militar se realice en Iquique glorioso. Gracias por que volvió el 21 de mayo a Iquique.