Qué lejos están aquellos días de marchas estudiantiles por mejorar la Educación. Esos grupos que partían en la UNAP para llegar al centro de la ciudad exigiendo Educación gratis y de calidad. Luego del acto, a veces comenzaba en rocanrol con el grito “uff qué calor, el guanaco por favor”, donde entraba en acción el carro lanzaguas de Carabineros.
Hoy, el «Guanaco» está estacionado frente a la Subcomisaria de Fuerzas Especiales juntando el óxido de la atmósfera marina, sin pega, casi como un monumento a la represión.
Pero no nos confiemos, que el “Guanaco” es como el Ave Fénix.
