A los 20 minutos de dejar de fumar ya se generan cambios, disminuye la presión arterial y, a las 12 horas, se normaliza el monóxido de carbono en la sangre.
A los 20 minutos de dejar de fumar, disminuye la presión arterial; a las 12 horas, se normaliza el monóxido de carbono en la sangre; a los 3 meses, mejora la función pulmonar y al año de suspenderlo, disminuye en un 50% el riesgo de sufrir una enfermedad coronaria. Este 31 de mayo se celebró el Día Mundial sin Tabaco, fecha que en el contexto actual nos recuerda con más fuerza la relevancia de evitar su consumo. “Si hacemos una lista de todos los beneficios que tiene dejar de fumar, seguro será bastante larga. Sin duda, es una de las mejores decisiones que puede tomar una persona, ya que a los 5 años de abandonar el tabaco disminuye el riesgo de cáncer en la boca, garganta y esófago; a los 10 años, las posibilidades de tener cáncer de pulmón bajan a la mitad y a los 15 años posteriores, el riesgo de una enfermedad coronaria es similar a la de un no fumador”, asegura el doctor Gino Fuentes, coordinador broncopulmonar del Centro Respiratorio Adulto de Clínica Bupa Santiago. Pero los beneficios no solo son físicos, sino también psicológicos. “Muchas veces, la conducta de fumar se asocia a una experiencia de angustia o ansiedad, en la que el cigarro ayuda a disminuir esa sensación desagradable. Pero si bien en un principio el efecto del tabaco puede sentirse como un alivio, genera una gran dependencia fisiológica y psicológica”, explica el psiquiatra de Clínica Bupa Santiago Cristóbal Fraumeni. Así, junto con los beneficios físicos ya descritos que tiene dejar de fumar, destacan los emocionales. “Dejar el cigarro permite a las personas sentirse protagonistas de su vida, volver a tener una sensación de autocontrol y autocuidado, lo que es muy importante. Además, de una u otra forma, lo hace enfrentarse a esa situación incómoda que lo llevó a fumar, permitiéndole conocerse mejor y resolver sus problemas de manera más funcional”, dice el psiquiatra. En este sentido, y partiendo de la base que la salud es una sola, los especialistas recomiendan seguir un tratamiento médico integral, que aborde tanto las molestias físicas de la abstinencia como las dificultades ansiedad o angustia que pueden surgir durante el proceso. “En este Día Mundial sin Tabaco, queremos hacer un especial llamado a dejar de fumar. Estamos en un contexto de pandemia mundial, enfrentándonos a una enfermedad respiratoria muy compleja, en la que tener una buena salud pulmonar base es muy importante para combatir de mejor manera el virus en caso de contagio”, añade el doctor Fuentes.]]>