El pato del BancoEstado está bien y ganando platita, a diferencia de Merlín que tiene una deformidad en su extremidad izquierda, pero su vida cambió en noviembre del año pasado cuando fue adoptado por la asociación «Goats of Anarchy Sanctuary» de Estados Unidos.
La agrupación llamó al tiro a Walkin’ Pets, una empresa que diseña y adapta ingeniosas sillas de ruedas para mascotas discapacitadas. Allí, los ingenieros trabajaron muchas horas para modificar el modelo de silla más pequeño de la empresa, que normalmente se usa para perros y gatos, y así poder adaptarla al cuerpo de Merlin, consigan los medio en Internet.
“Verlo dar sus primeros pasos fue realmente genial. Una vez que todo estuvo arreglado, fue realmente increíble. Además, la silla puede sumergirse. Solo recomendamos evitar el agua de mar para mantener el dispositivo en perfecto estado“, dijo el mandamás de Walkin‘ Wheels, Mark Robinson.
En resumen no solo hay patos malos, ni del estilo de la mascota del BancoEstado.