abril 26, 2025
inicionoticiasactualidadcultura popdeportesempresasopiniónpolíticatierra de campeonesalta suciedad

27

Feb

Para siempre | Roberto Bustamante desde Colombia

“Creo que uno puede escribir Cien años de soledad, un cuento de marineros, o describir un partido de fútbol y siempre habrá un contenido ideológico”.

Gabriel García Márquez

WhatsApp Image 2025 02 17 at 15.05.09
Roberto Bustamante desde Colombia,

Me he atrasado en enviar la última crónica. Entenderán las razones. El despertar en Bogotá fue a las cinco de la mañana con la satisfacción de saber que Deportes Iquique había logrado superar la fase 2 de la Libertadores. La celebración fue tranquila, viendo la repetición del partido, comiendo pizzas y tomando cervezas. Debo agradecer el alojamiento que me dieron los “piños” la noria, antifa celeste y tierra celeste. Los muchachos y muchachas se organizaron de tal manera que arrendaron una casa, buses para llegar al estadio, entre otras cuestiones. Debo decir que la organización del resto de los grupos dentro de La Fiel del Norte fue espectacular. Fuimos una familia recorriendo la lluviosa Bogotá sin ningún altercado. Nota aparte fue el comportamiento de la policía (los tombos) con los viajeros. Ante la costumbre de la prepotencia de la policía chilena, fue llamativa la amabilidad y la coordinación para acompañarnos al estadio, al igual que dentro de él con personal municipal que nos facilitó en todo momento el recorrido hasta llegar al lugar asignado en tribuna.

Terminado el encuentro nos vamos al hotel para celebrar con los jugadores. Se acercan donde estamos, brindamos, pero como el equipo está en varios frentes lo próximo es el juego frente a católica y la hinchada le recuerda que el sábado hay que ganar, que hay que ir partido a partido.   

Iquique ya pasó de fase, desayunamos cervezas y sándwich de huevo con una sonrisa de oreja a oreja y hablamos de ir a Lima. Reviso por internet el precio de los pasajes y no es tan descabellado sumar millas a la bella capital peruana. Me despido porque debo volver a Pereira, mi campamento base, no sin antes pasar por el centro cultural García Márquez. La muestra del premio Nobel recorre su vida y obra, parte de su biblioteca, fotografías de sus viajes y sus amigos y amigas, su familia.

Voy de regreso. El terminal de buses es un lujo (Terminal Salitre, uno de los tres o cuatro que hay en Bogotá) lo más parecido a un aeropuerto, con variados restaurants, baños, Wi-Fi gratuito, entre otras comodidades. Voy rumbo al eje cafetero. En Ibagué se revelan paisajes de una geografía con muchas quebradas y valles, mucho árbol de plátanos y de café. Atravesamos una ramificación de la cordillera de Los Andes (son tres que se abren desde Ecuador y este es el brazo central) pasando por cuestas y neblina de altura. Este último trayecto es denominado La Línea, un páramo frío y con pequeños poblados. Llego a Pereira y me espera mi primo quien se rehabilitó de su problema gástrico. Esta mucho más animado que cuando lo dejé. Quiere recuperarse para este fin de semana que son mis últimos días aquí. Le digo que volví con lo prometido: la clasificación de Iquique.  

Hoy que escribo esto como despedida leo noticias sobre la conmemoración de los 30 años del accidente que dio muerte a dos que vistieron la celeste. Axel Vega y Gonzalo Ramos volvían de un asado del plantel de honor, por la costa hacia el sur, cuando se estrellaron a la altura de playa Las Pizarras. Dicen que Ramos tuvo ofertas ese mismo año para ir a clubes de Santiago y él no las aceptó para quedarse en Iquique, sin saber que se quedaría para siempre.       

Comentarios

Deja el primer comentario

ingreso de usuario

Google reCaptcha: Clave del sitio no válida.