En las últimas semanas del gobierno del Presidente Sebastián Piñera, no hay un atisbo de autocrítica por la crisis migratoria que hay en el norte de Chile.
En dos oportunidades el Mandatario invitó a los venezolanos, palabras que al parecer muchos ciudadanos vieron la forma de escapar de la dictadura de Maduro.
«Vamos a seguir recibiendo venezolanos en Chile, porque tenemos un deber de solidaridad y yo nunca olvido que cuando Chile perdió su democracia, Venezuela fue muy generosa con chilenos que buscaban nuevas oportunidades”, dijo el mandatario el año 2018en una entrevista en Deutsche Welle.
En esa época Piñera buscaba convertirse en el líder de la región.
Un año después Piñera va a Cúcuta con ayuda para los venezolanos y es parte de un hecho del cual, con mejor ojo político, Bolsonaro y Macri no acudieron.
Piñera creyó los informes de inteligencia de Duque que indicaban que las fuerzas armadas venezolanas derrocarían a Maduro.
“No puede haber nada más cruel que un gobierno que le niega la ayuda humanitaria a su propio pueblo. No dejo de preguntarme cómo una persona puede tener tanta ambición y estar dispuesto a causarle tanto dolor y sufrimiento a su propio pueblo durante tanto tiempo por el solo afán de aferrarse a un poder que no le pertenece. Llegó el momento de decir fuerte claro que Maduro es parte del problema y no de la solución. La democracia es la solución para Venezuela”, dijo Piñera en Cúcuta.