El embajador en Uruguay, Eduardo Contreras, decidió retroceder en sus declaraciones dadas a un diario de Montevideo, dando disculpas públicas a los empresarios y a la Democracia Cristiana para mantenerse en el cargo, mientras que el Gobierno dio por cerrado el episodio.
Contreras, quien fue llamado a consultas por el canciller Heraldo Muñoz tras sus polémicas declaraciones a un medio uruguayo sobre el rol de la DC en el golpe de 1973 y su creencia de que la ultraderecha está detrás de los bombazos en el Metro Escuela Militar y Los Dominicos, dio una pequeña declaración en la que dio sus excusas por tales comentarios a la propia falange y al empresariado.
Tras reunirse con el canciller, el embajador dio sus excusas públicas por las manifestaciones que “fueron desafortunadas que y no se condicen el clima de búsqueda de un país inclusivo que está realizando el Gobierno”
Explicó que tale comentarios fueron hechos en el tenor de una conversación “preliminar e informal” para posteriormente tener una entrevista más formal.
En ese sentido, Contreras pidió disculpas a los empresarios y a la DC, porque “he trabajado intensamente con los empresarios, en el tiempo que he ejercido como embajador los conozco y sé que mis dichos no reflejan fielmente mis pensamientos y a la DC porque me consta su vocación democrática y porque forman parte de la misma coalición política de mi partido”.
En tanto, el Canciller Muñoz sostuvo que “hemos aceptado las excusas que ha hecho el embajador contreras y por lo tanto para el gobierno este episodio está cerrado”.
Por tal motivo, el ministro de Relaciones Exteriores precisó que “el embajador regresará a Uruguay en la Brevedad y no tengo nada más que agregar”.
Agregó que con el embajador había tenido un “diálogo franco y extenso”, mencionando que “le he reiterado que los embajadores renuncian a la libertad de opinión cuando asumen un cargo en representación de nuestro país”.
Con la ratificación de Contreras en la legación diplomática, el PC le habría ganado el gallito a La Moneda, debido a que desde el jueves pasado, cuando se realizaron las declaraciones del embajador al periódico La Diaria, no han cesado las conversaciones, gestiones y llamadas a todo nivel con el objetivo de mantener al primer comunista que encabeza una representación diplomática desde la Unidad Popular.
El propio timonel del comunismo chileno, el diputado Guillermo Teillier ha negado que su colectividad haya hecho presiones.
