Un pequeño grupo de simpatizantes y detractores del expresidente peruano Pedro Castillo se ha enfrentado este miércoles frente a la comisaría de Lima en la que está detenido el exmandatario, acusado de la presunta comisión del delito de rebelión y quebrantar el orden constitucional, tras el anuncio de este de disolver el Congreso.
Los manifestantes y un reducido grupo de de violentos se han enfrentado con palos, banderas y otros objetos. Además, simpatizantes de Castillo lanzaron piedras, adoquines y otros objetos a los cuerpos policiales de la Policía Nacional de Perú en el centro de la capital peruana.
La detención de Castillo se produce poco después de que el Congreso de Perú en sesión extraordinaria llevara a cabo la tercer moción de censura contra él por incapacidad moral, logrando con éxito en esta ocasión destituirle. La votación se saldó con 101 votos a favor, seis en contra y diez abstenciones.
Tras la medida, tildada mayoritariamente como ‘autogolpe de Estado’ y no respaldada ni tan siquiera por su gobierno, fue destituido por el Congreso por “permanente incapacidad moral” con 101 votos de 130 a favor, y arrestado por la Policía.
Después juró la que era vicepresidenta, Dina Bolaurte, como nueva jefa de Estado y llamó a una tregua política para empezar un amplio proceso de diálogo entre las fuerzas e instituciones.