La pandemia ha generado una serie de cambios en las formas de trabajar de los chilenos y chilenas. El alza de casos y las restricciones sanitarias generaron en su momento que muchos sectores económicos y diversas zonas del país, debieran optar por el teletrabajo para sus colaboradores, ya sea de manera parcial o total.
Sin embargo, aquellos días son parte de una etapa al parecer ya superada. Con el buen momento pandémico, sumado a un gran porcentaje de la población vacunada y al relajo en las medidas restrictivas, la mayoría de los trabajadores ha vuelto a la presencialidad. En la zona norte del país, por ejemplo, solo un 14% de las personas continúa realizando sus labores de manera remota.
Así lo indica un estudio elaborado por Mutual de Seguridad llamado “Pandemia y percepción sobre riesgos y preferencias en el retorno laboral 2022”, el cual detalló que el 85% de las personas está trabajando actualmente de manera presencial en el norte. Por otra parte, un 7% de los trabajadores se encuentra laborando de manera híbrida; mientras que un 7% continúa trabajando de forma completamente remota.
Pese a lo anterior, al ser consultado por sus preferencias, solo un 37% de los trabajadores de la zona norte elige la presencialidad. La mayoría prefiere el formato híbrido (43,1%), con algunos días trabajando en casa y otros desde las oficinas o faenas. Mientras que un grupo menor opta por el trabajo completamente remoto (19,8%).
“Luego de varios meses en cuarentenas, trabajando desde la casa y con escaso contacto con el resto de las personas y los compañeros de trabajo, las personas han optado por retomar la presencialidad, de manera parcial o completa. El trabajo completamente remoto, en ese sentido, ha ido perdiendo bonos, pues ha quedado demostrado que no necesariamente es beneficioso para la salud mental, ni más cómodo que la oficina. Si bien, los trabajadores valoran algunas características de este formato, la gran mayoría prefiere desempeñarse solo algunos días desde casa y el resto de manera presencial”, comenta Ignacio Puebla, Psicólogo Jefe del Dpto. de Factores Humanos de Mutual de Seguridad
El estrés persiste, pero también surgen emociones positivas
Durante la pandemia, la salud mental se ha visto particularmente deteriorada. Emociones negativas como el estrés, agobio y cansancio se han vuelto recurrentes entre los trabajadores, quienes han debido lidiar con diversas responsabilidades y tareas, además de una constante preocupación respecto de la situación sanitaria.
Pese a que los casos han ido a la baja y desde hace algún tiempo se vive una nueva normalidad, el 38,2% de los trabajadores de la zona norte en la actualidad se siente estresado. Adicionalmente, un cuarto de los trabajadores experimenta sensaciones de aburrimiento y monotonía. Y en menor medida, los trabajadores sienten temor, inseguridad e incertidumbre (19,9%). Paralelamente, más de la mitad de los colaboradores considera probable contagiarse de Covid-19 este 2022.
No obstante, el desconfinamiento también ha dado paso a emociones positivas. Un 26,3% de los trabajadores se siente en la actualidad optimista y esperanzado. Asimismo, el 35,5% se siente afortunado y grato. Esto habla de un contexto que ha ido mejorando en base a la perspectiva de los trabajadores, que han visto cómo se han reactivado los sectores económicos en el último tiempo y, además, han podido retomar sus actividades cotidianas.
“Por una parte, podemos observar emociones negativas que persisten en el tiempo, como el estrés, lo que es razonable, debido a los inusuales sucesos que hemos vivido en el último tiempo. Sin embargo, lo interesante es que también han comenzado a surgir sensaciones positivas, como gratitud, motivación y esperanza. Sentimientos que vienen acompañados de un contexto más favorable a nivel de pandemia, donde los trabajadores ven al fin algo de luz, en esta historia que parecía de nunca acabar”, cierra Puebla.