La afirmación que la masturbación es un acto inmoral, se asienta en la creencia de que ésta práctica impedía que la especie humana se mantuviera viva sobre el planeta por la emisión improductiva de semen en el caso de la masculina, y en el caso de la masturbación femenina se afirmaba que si las mujeres se masturbaban podrían alejarse de los hombres por preferir autocomplacerse. En una etapa posterior se empezó a considerar que la masturbación ocasionaba daños morales, ya que condenaba las almas por ser pecaminosa, y generaba daños físicos como provocar numerosas enfermedades. Le siguió a éstas creencias erróneas considerar que a los niños que se masturbaban les crecerían pelos en las manos, la cara se les volvería verde, se les secaría el pene o el clítoris,se volverían locos, les saldrían granos en la cara. Lo cierto es que todos éstos conceptos erróneos fueron desvaneciéndose con el tiempo, por no contar con un sustento real que los avale. Muy por el contrario, numerosos estudios encontraron más beneficios que daños o efectos nocivos para quienes la llevan a cabo. Hoy en día ya se derribaron muchos de los prejuicios asociados a la masturbación, pero todavía quedan algunos mitos instalados, que es necesario contribuir con información para derribarlos.]]>