Cuando salimos con la persona que nos gusta, hay muchas cosas que tratamos de descifrar en la cita. Desde las indirectas que nos manda en alguna conversación, hasta qué significa la posición en la que está sentado. Esto se resume a su lenguaje corporal o kinésico.
En base a libros como The Body Language of Flirting, Dating and Romance (Gestech Publications) de Raymond C. McGraime, Secrets of Sexual Body Language (Amorata Press) de Martin Lloyd-Elliott o Body Language Secrets: A Guide During Courtship & Dating (Steel Balls) de R. Don Steele, en El Confidencial recopilaron algunas señales de lenguaje corporal que a continuación te contamos qué significan cuando estás en una cita.
Si nos arreglamos frente a él
Arreglarnos el lápiz labial, o corrernos el pelo de la cara son algunas señales que todas las mujeres damos cuando nos gusta alguien. Nos apresuramos a que nuestro look esté impecable.
Inclinar el cuerpo hacia el otro
Estando en un restaurante o en un bar, el corrernos hacia la otra persona indica que somos receptivos a lo que nos tiene que ofrecer. Por el contrario, si nos echamos hacia atrás, mostramos una actitud reservada y distante.
Si sus pies te señalan
Cada vez que nos sentamos, inconscientemente nuestros pies apuntan al lugar donde queremos dirigirnos. Por lo que si esa persona tiene sus pies hacia ti significa que siente curiosidad hacia ti, si están apuntando a la puerta, es porque sólo piensa en irse.
No correr la mirada cuando están cerca
En este caso, la mayor pregunta es ¿cuándo es aceptable besar a la otra persona? Según los expertos consultados por la web, hay dos factores que responden a esta pregunta.
Número uno, “que la distancia entre las dos caras sea cercana, es decir, haya superado los límites de lo socialmente aceptable con un amigo o compañero”. El segundo, “que la mirada a los ojos entre los dos se mantenga durante un período más o menos prolongado de tiempo sin que ninguno desvíe la mirada”.
Alzar las cejas
“Se trata de un gesto que indica que tenemos nuestros ojos abiertos a lo que tenemos delante de nosotros, así como que sentimos curiosidad y predisposición”, explican en la web. Sin embargo, si se hace este gesto luego de una propuesta indecente, va a significar otra cosa.
Tocar al otro
Cuando tocamos al otro, de manera no sexual, es porque queremos acercarnos y sentirnos más próximos de la persona con la que nos sentimos a gusto.