La región de Tarapacá y el país entero están conmocionados por el caso de un niño de 13 años que vivía en condiciones de esclavitud y fue víctima de torturas en Iquique. Tras la formalización de su madrastra, Glenda Espinoza, por el delito de homicidio frustrado, la diputada Danisa Astudillo expresó su enérgica condena y señaló que este crimen refleja una grave falla del Estado en la protección de la infancia.
“El caso del niño de 13 años, brutalmente torturado por su madrastra, golpea especialmente a nuestra región. Este crimen atroz refleja un abandono institucional inaceptable”, declaró Astudillo. La parlamentaria socialista anunció acciones inmediatas, como oficios al Ministerio de Desarrollo Social, SENAME y Poder Judicial para exigir información detallada y establecer responsabilidades. Además, impulsará una revisión profunda de los protocolos de protección infantil.
Astudillo también destacó que este caso no es aislado, mencionando el caso de una niña de 8 años comercializada en Bolivia y traída a Chile para ser vulnerada. “La infancia en Chile está desprotegida. Es nuestro deber actuar con la fuerza del Estado para garantizar su protección”, afirmó.
Desde el Congreso, la diputada reiteró su compromiso de trabajar por la justicia y la implementación de medidas estructurales que protejan efectivamente a niños, niñas y adolescentes. La comunidad espera respuestas y acciones concretas para evitar que tragedias como estas se repitan.
