NELSON MONDACA I.
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El proyecto de ley del Presupuesto de la Nación para el próximo año fue presentado por el Presidente Gabriel Boric al país el jueves recién pasado por Cadena Nacional.
Los énfasis están puestos en los problemas que son más urgentes de nuestra ciudadanía, como son: la seguridad pública, la reactivación económica y los graves problemas sociales.
Me pregunto ¿Cómo debería ser un Presupuesto de un país con una economía de desarrollo productivo con bajo niveles de crecimiento? ¿Se puede ser lo suficientemente competitivo si la economía depende de forma principal de factores exógenos y/o, internacional? ¿Chile tiene poder político y de negociación para fijar un precio más alto por la exportación del Cobre en el mercado mundial? ¿Existe un valor agregado en el que podamos incidir para crecer en rentabilidad, tal vez, con energía solar?
Agreguemos, la dura posición de un sector económico extremo que ”niega la sal y el agua” al erario nacional. Protegen a toda costa los beneficios que les han reportados riquezas irracionales e inconmensurables. Mientras la mayoría de nuestra sociedad sufre la consecuencias de la Pandemia del covid-19 y hoy enfrentamos el factor externo de las consecuencias de la guerra de Rusia contra e invasión de Ucrania.
Repasemos unos datos estadísticos de nuestra Región de Tarapacá. Un vistazo al mes de Julio reciente. El valor de las exportaciones alcanzó los US$ 361, 5 millones “registrando un decrecimiento de 28,8% en doce meses” En el Boletín Nº 113/15, septiembre del año en curso, del INE leemos “El sector minero incidió mayormente en este resultado, ya que el valor de sus envíos registró un decrecimiento de 30,0% en doce meses, totalizando US$342,4 millones.”
El gasto público aumentaría en un 4.2%, según el actual proyecto para el año 2023.
No pasemos por alto que Chile es un país muy centralizado, extenso y heterogéneo. Es el mayor exportador mundial de cobre, litio, yodo, uvas y harina de pescado. A nivel Continental se sitúa como la quinta economía de América Latina y es miembro de la OCDE.
Veremos qué pasa finalmente en el Parlamento. El Gobierno tratará de mantener los equilibrios fiscales. La oposición y sus diferentes bancadas, también, harán presente sus puntos técnicos y políticos. Asimismo, el oficialismo respaldará el proyecto presentado por el Ejecutivo con el fin de satisfacer las demandas sociales y hacerlo lo más eficiente posible. La defensa del proyecto recae en el Ministro de Hacienda, Mario Marcel. Aquí veremos sus reales competencias y experiencia política.
Un precio alto del dólar tiene la lógica de un doble juego. Por un lado, exportamos más caro y por otro, importamos los combustible y alimentos, también mucho más caros. De tal manera, tenemos una fuerte dependencia de los flujos del dólar norteamericano y que desencadena una rápida y alta inflación. Además, no podemos colocarnos una venda en los ojos: a) Vivimos en un mundo dominado por las grandes potencias desarrolladas y económicas. b) La guerra de RUSIA la pagamos los países menos desarrollados y satélites de los imperios de la humanidad. ¡Que tremenda y cruel barbaridad!
Retornando al área chica y enfrentando los principales desafíos del que se hará cargo el presupuesto de la nación en nuestra Región de Tarapacá, es lo más trascendente e importante.
¿Cuántos serán en total estos recursos? ¿Qué nuevas obras en infraestructura públicas veremos realizadas en el corto y mediano plazo? ¿Cuánto se invertirá en innovación de acuerdo al plan regional? ¿Se van terminar las calles en mal estado y otras obras del entorno de Zofri? ¿Se llevarán a efecto las operaciones quirúrgicas que están en listas de espera por años en nuestro hospital? ¿Por el simple hecho de ser una Región de Zona Extrema, tendremos un delta en estos recursos para que la ruta Huara – Colchane sea de nivel internacional? Etcétera y un largo etcétera.
Lo que me lleva sostener, que no podemos caer en lo mismo de siempre. Una ciudad postergada en su progreso y un abandono por parte del Centralismo indigno de un país que dice ser “unitario”. Salgamos del vicio del letargo. Abramos paso a una Región del siglo XXI.
Estamos muy atrasados. Nuestras nuevas generaciones se lo merecen. Las pandemia del Covid-19 ya nos golpeó duramente. Por supuesto, hay que seguir cuidándose según nuestra cultura; que el miedo no nos vuelva a la era primitiva, hagamos nuestros días más felices.
Hay que construir una Región más competitiva, más productiva y turística. Tampoco, es una tarea que se hará solamente por vía administrativa. Nos corresponde a cada uno de nosotros tomar las responsabilidades que nos incumben. Yo asumo las mías. Espero lo mismo de mis coterráneos y dar lo mejor de cada uno en estos objetivos de vida…. Al Presidente Boric, le corresponde reordenar la casa de un país que arrastra grandes dificultades históricas.
